No hay razón para entrar en pánico por el reciente aumento de hospitalizaciones debido al COVID-19 en el estado, dijo este martes el gobernador Greg Abbott.
A pesar de que Texas ha tenido un número récord de personas hospitalizadas por COVID-19 en los últimos días, Abbott dijo durante una conferencia de prensa que el estado todavía tiene "miles" de camas de hospital disponibles.
"El aumento de la ocupación de las camas de hospital, es preocupante", dijo. "Pero hoy no hay razón para alarmarse".
Abbott dijo que el estado se mantiene en el "nivel de amenaza más bajo de nuestra capacidad hospitalaria", a pesar de que el martes alcanzará otro récord de hospitalizaciones con más de 2,600.
"Tenemos mucho espacio para ampliar las camas", dijo.
Mira la conferencia de prensa en inglés en el video a continuación:
Abbott dijo que el estado tiene planes de habilitar camas de hospital en entornos alternativos, si fuera necesario. Mientras tanto, dijo, hay camas disponibles en todo el estado. En el área de Austin, por ejemplo, los funcionarios dicen que casi el 30% de las camas están desocupadas actualmente.
En cuanto al reciente aumento de casos, Abbott dijo que las poblaciones de presos y los incidentes aislados de errores de datos explican gran parte del aumento. También dijo que Texas sigue siendo uno de los estados más grandes con un número de casos relativamente bajo y tiene la segunda tasa de mortalidad más baja del país.
John Hellerstedt, comisionado del Departamento Estatal de Servicios de Salud de Texas, dijo que el reciente aumento de pacientes con COVID-19 era muy esperable.
"Pero estamos viendo que sucede a un nivel manejable", dijo. "Pero quiero subrayar que el éxito continuo depende de la gente del estado de Texas."
Abbott y los funcionarios de salud dijeron que los tejanos deben seguir quedándose en casa si pueden, usar máscaras, lavarse las manos y distanciarse físicamente de otras personas. Abbott atribuyó el aumento de los casos en parte a que menos personas tomaron esas precauciones.
Cuando se le preguntó, Abbott no dijo si permitiría a los funcionarios locales multar a las personas que no usen máscaras en los espacios públicos.
Durante una entrevista con NPR este martes, el alcalde de Austin, Steve Adler, dijo que el estado le ató las manos a las autoridades locales cuando se trata de hacer cumplir las normas que frenarían la propagación de la enfermedad.
"En este momento sólo puedo hacer recomendaciones a la comunidad y reconocer que la comunidad realmente elige lo que ocurra independientemente de lo que el gobernador permita o no", dijo.
Los alcaldes de nueve de las ciudades más pobladas del estado enviaron una carta a Abbott este martes pidiendo la autoridad para hacer cumplir las reglas sobre el uso de máscaras.
"Un enfoque único no es la mejor opción", escribieron los alcaldes de Austin, Houston, San Antonio, Dallas, Fort Worth, El Paso, Arlington, Plano y Grand Prairie. "Debemos confiar en que los funcionarios locales tomen decisiones informadas sobre la política de salud. Y si a los alcaldes se les da la oportunidad de exigir protectores faciales, creemos que nuestras ciudades estarán preparadas para ayudar a reducir la propagación de esta enfermedad".
El lunes, Adler extendió la orden de quedarse en casa para Austin, que requiere que cualquier persona mayor de 10 años se cubra el rostros al salir de casa. Sin embargo, la norma no puede obligarse a cumplir porque una orden estatal que alienta a las personas a usar máscaras o cubrebocas también establece que "ninguna jurisdicción puede imponer una sanción civil o penal por no usar un protector facial".
Audrey McGlinchy contribuyó a esta historia.
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