Este reportaje se presentó originalmente en directo en el Paramount Theatre en febrero. Nuestro próximo programa ATXplained Live es el 11 de octubre. Más información aquí.
Las torres del oeste de Austin sirven como gigantescos puntos de referencia durante el día y, literalmente, como faros por la noche. Día tras día, mes tras mes, año tras año, estos guardianes vigilan la ciudad como nadie.
Pero, ¿qué son exactamente estas torres? ¿Por qué están ahí, aparentemente todas en el mismo sitio?
Mary Halaney vive en Austin desde hace 31 años. Ella y otras personas preguntaron por las torres para nuestro proyecto ATXplained. Pero preguntar a KUT no bastó para satisfacer la curiosidad de la familia Halaney. Tenían que acercarse a las torres.
"Es un poco difícil de encontrar", dijo Halaney después de un viaje para verlas. "Hay un montón de carreteras sinuosas, y terminas en la cima, y ahí están. Y tienen como una alambrada alrededor con señales de advertencia que dicen: 'No te acerques a menos de tantos pies'. Me dio un poco de miedo, pero está en medio de un barrio de lujo".
"Barrio de lujo" es un eufemismo. El fundador de Dell, Michael Dell, y su esposa, Susan, son propietarios de gran parte de los terrenos que rodean la torre. También hay un montón de médicos, abogados, agentes inmobiliarios y otros directores ejecutivos que disfrutan de una serena reclusión.
Pero volvamos a Halaney.
Un viaje a las torres provocó más preguntas de sus hijos. Su hija dijo que el lugar le recordaba a episodios de Welcome to Night Vale, un podcast ficticio en el que un locutor de radio local lee anuncios sobre las rarezas de la ciudad. Entre ellos hay varias referencias a luces inexplicables en el cielo nocturno.
Los hijos de Halaney también querían saber si había controversias en torno a la ubicación de las torres.
"¿Utilizaron el dominio eminente?" preguntó Halaney.
Entonces, su imaginación se apoderó de ellos.
"Mi hijo dice: '¿Por qué siento una energía espeluznante que me empuja hacia las torres? "Y luego mi hija dice: '¿Por qué han aparecido en mis pesadillas?'".
Transmisores de información
Las impresiones de los Halaney no son del todo erróneas. La cadena de alambre de púa y alambrada podría parecer la materia de las pesadillas inspiradas en Netflix, una vibra de que aquí es donde tienen lugar los experimentos en un episodio de Stranger Things.
Para responder a sus preguntas, recurrí al ingeniero de torres de KUT, Cole McClellan. Lleva 56 años trabajando en la Universidad de Texas. Empezó a trabajar en torres de radio antes de eso, cuando era adolescente. Aunque no se acuerda toda la información sobre las torres de radio es mucho más de lo que la mayoría de la gente recuerda.
Y eso es lo que hacen esas torres: enviar y recibir señales de radiodifusión para radio, televisión, teléfonos móviles, equipos de radio de gestión de emergencias, traductores, repetidores en tierra y copias de seguridad para la mayoría de ellos.
Muchas de las torres miden más de mil pies. Todas son de propiedad privada. KXAN, filial de la NBC, emite desde su propia torre. Pero la mayoría de las emisoras alquilan espacio en las torres. KUT y KUTX alquilan un espacio a American Tower Co.
Las más altas tienen una altura bastante próxima entre sí. La torre de KXAN, con algo más de 1.300 pies, es la estructura más alta de Austin. Tiene casi el doble de altura que el edificio Jenga de Austin.
Como son tan altas, necesitan balizas para evitar que los aviones se estrellen contra ellas. Lo que se ve parpadear en rojo por la noche son luces del tamaño de un pastel de bodas. Para que los aviones las eviten durante el día, las torres están obligadas por ley a pintarse de dos tonos, naranja aviación y blanco exterior (colores de pintura reales).
¿Y por qué allí?
"Allí era barato", dijo McClellan. "Creo que fue la disponibilidad, la altura y el acceso".
Terreno barato
Con el mercado inmobiliario de hoy en día, puede resultar difícil hacerse a la idea, pero hubo un tiempo en que la gente no quería vivir en las colinas del oeste de Austin. En los años sesenta, la zona de West Lake Hills era mayoritariamente pobre y rural.
La gente de allí, conocida coloquialmente como "cortadores de cedro", se ganaba la vida a duras penas talando cedros para hacer postes para vallas.
Por aquel entonces, el terreno, a pocos minutos del centro de Austin, no tenía mucho valor. Así que las empresas de radiodifusión se lanzaron a comprar los lugares que necesitaban.
Las torres están situadas a unos 900 pies sobre el nivel del mar. Están en la cima del monte Buckman y del cercano monte Larson. Aunque no son especialmente grandes ni distintivas, en algunos sitios web de mapas topográficos aparecen como picos separados.
Estas cosas tan altas están en uno de los puntos más altos por una razón: para enviarte señales directas de radio y vídeo -casi todo lo que ves y oyes- estés donde estés.
La mayoría de las señales de radio, televisión, radio por satélite, comunicaciones de emergencia, telefonía móvil y radio meteorológica de Austin tienen aquí parte de sus operaciones.
'Energía espeluznante'
Dentro de la valla, la escala de las torres asombra. Mirando desde el suelo, parece que se estén doblando. Si se mira demasiado tiempo con algunas nubes en movimiento, puede dar un poco de vértigo.
En la base de cada torre hay un pequeño edificio que alberga los equipos de cada emisora que utiliza esa torre en concreto. Esto requiere toneladas de cableado e ingeniería para asegurarse de que las señales no se mezclan entre sí. Hay avisos de alta tensión a cada paso. También los hay de radiofrecuencia.
Y el hijo de Halaney podría estar en algo cierto con toda la "energía espeluznante". Una exposición excesiva a la radiofrecuencia eleva la temperatura corporal y daña los tejidos.
Infraestructuras esenciales
A pesar de la importancia de las torres, rara vez hay más de un puñado de personas en el lugar en un momento dado. Para la mayoría de nosotros, las torres forman parte del paisaje. Damos por sentado que todo lo que necesitamos ver, oír o saber se puede ver, oír o saber.
Hasta que llega una crisis y necesitamos absolutamente la información que sale de ellas.
En febrero, el hielo paralizó gran parte de la infraestructura de Austin. La gente recurrió a sus radios, televisores y teléfonos para obtener información importante.
El hielo estrujó las ramas de los árboles y una torre de radio. Por suerte, no era la torre que alquila KUT. Pero sí dejó sin suministro eléctrico, lo que obligó a Cole y a docenas de ingenieros a mantener generadores para que las señales de radio siguieran funcionando. KUT tuvo que utilizar su torre de reserva mientras se realizaban las reparaciones.
Puede que las torres de radio del oeste de Austin no sean bonitas, pero están ahí; cuando fuera hace más de 100 grados, llueve a cántaros, hace un frío feroz, hay vientos fuertes y relámpagos, nos mantienen a todos informados.
Traducido por Maria Arce
