El Distrito Escolar Independiente (ISD, por sus siglas en inglés) de Austin congelará las contrataciones en todo el distrito a partir del 1 de marzo, ya que está tratando de salir de un agujero financiero que se ha profundizado desde que el presupuesto 2024-2025 fue aprobado en junio.
Aunque los funcionarios del distrito anticiparon inicialmente un déficit presupuestario de $78 millones, esa cifra subió a $92 millones. Ahora, ha llegado a $110 millones, a pesar de que el ISD de Austin ya ha hecho recortes de gastos que equivalen a $26 millones. Sólo los servicios de educación especial estarán exentos de la congelación de contratación, según un portavoz del distrito.
La directora financiera interina del ISD de Austin, Katrina Montgomery, compartió la noticia sobre el déficit presupuestario con los síndicos durante una sesión informativa de la junta escolar el jueves. Dijo que los esfuerzos para reducir el déficit deben continuar, especialmente para evitar que la cuenta de ahorros del distrito llegue a un nivel demasiado bajo.
“No podemos detenernos aquí. No podemos simplemente decir que hicimos [recortes de] $26 millones y parar”, dijo.
Montgomery dijo que una combinación de solicitudes de gasto y una financiación federal más baja de lo previsto para el programa de Salud Escolar y Servicios Relacionados impulsó el déficit. Esas solicitudes incluyeron $16 millones para contratos de evaluación de educación especial, $7 millones para materiales de instrucción y $6 millones para reparaciones y mantenimiento.
“Lo que estamos intentando es ser muy valientes para reducir otros $32 millones [en costos]”, dijo.
El objetivo, dijo Montgomery, es conseguir que el déficit vuelva a $78 millones durante el año fiscal en curso. Además de la congelación de la contratación, otras estrategias que el ISD de Austin está utilizando para reducir el déficit incluyen la reorganización de departamentos, la venta de propiedades del distrito y la mejora de las tasas de asistencia de los estudiantes, que implica más fondos estatales. Una congelación del gasto también está sobre la mesa.
Montgomery dijo que múltiples vientos en contra han hecho que sea más difícil reducir el gasto y aumentar los ingresos. Entre ellos, se encuentra un clima político incierto para las escuelas públicas a nivel estatal y federal, mientras que la Legislatura de Texas considera crear un programa de vales escolares y el presidente Trump emite órdenes ejecutivas relacionadas con la educación. Entre ello se incluye permitir que las autoridades de inmigración entren en escuelas y casas de culto.
“Tenemos padres que posiblemente están manteniendo a sus hijos en casa debido a su estado de miedo”, dijo a los síndicos.
La situación financiera del ISD de Austin también se ha visto agravada por otros factores como la inflación y los mandatos de seguridad escolar que los legisladores estatales aprobaron en 2023 pero no recibieron el financiamiento suficiente. Montgomery señaló que el ISD de Austin recibió $2.5 millones del estado para la seguridad escolar, pero que el gasto real supera los $23 millones. Tanto la Cámara de Texas y el Senado han propuesto aumentar los fondos de seguridad escolar en $400 millones para ayudar a cerrar la brecha de financiación.
El ISD de Austin no es el único distrito escolar del centro de Texas que ha visto crecer su déficit presupuestario previsto para este año fiscal. La junta escolar del ISD de Eanes, en un esfuerzo por recortar un déficit proyectado de $6.3 millones el próximo año escolar, votó a favor de cerrar una escuela primaria y consolidarla con otra.
Funcionarios del ISD de Leander también anunciaron la semana pasada que anticipan un déficit presupuestario de $34.4 millones. Para reducir esa cifra, el distrito planea recortar más de 200 puestos escolares después de que termine el año escolar actual.
